Estábamos empapados de andar bajo la tormenta. El agua caía fría, fuerte y tan densa, que casi no veíamos lo que teníamos delante. Yo me sentía vigorizada, reía y gritaba de alegría con cada rayo y cada relámpago. "¡Eres la loca de las tormentas!", gritaste. Y yo reí todavía más.
Corrimos a casa y nos metimos en la ducha para entrar en calor. Tú abriste la ventana para que pudiera ver la tormenta mientras nos duchábamos.
- "Nunca había visto una tormenta mientras me duchaba, ¿y tú?"
- No - contesté- Ver la tormenta mientras te duchas con la loca de las tormentas. ¿Lo recordarás siempre?
Me miraste a los ojos y me besaste. "Siempre".
En aquel momento sentí algo tan especial que supe que, por mucho que pasara el tiempo, yo también lo recordaría siempre.
Tribal Arm And Shoulder Tattoo
Hace 12 años